Poco a poco, los GPS más avanzados han comenzado a adquirir algunas de las características del móvil para evitar perder competitividad.
El TomTom Go LIVE 1005 de esta página, por ejemplo, incluye una conexión 3G, un navegador para buscar locales y puntos de interés a través de Google e información de hoteles y restaurantes de Expedia y TripAdvisor. Se puede programar un viaje entero, desde la ruta hasta los restaurantes donde parar para comer, los puntos de interés que visitar o el hotel donde hospedarse, sin tocar el teclado del PC. Al llegar al destino es fácil de desmontar -se ancla al salpicadero mediante un soporte magnético- y sirve como pequeña guía de viajes de bolsillo con información turística y de ocio local.
Su pantalla de cinco pulgadas -mayor que la que ofrecen los teléfonos- es multitáctil y capacitiva y, además de dar instrucciones en voz alta convencionales («gire a la derecha», «manténgase en el carril izquierdo»...), es capaz de pronunciar en voz alta los nombres de las calles, lo que ayuda a orientarse más fácilmente y rebaja el stress de la conducción. TomTom lo ha equipado con mapas de todo el mundo y acceso a la base de datos de conducción inteligente, con advertencias creadas por otros conductores e información meteorológica entre otros datos.
Otros fabricantes, como Garmin, están probando estrategias parecidas, y añaden funciones de personalización especiales que por ahora no están disponibles en móviles. La última idea ha sido incluir las voces de los personajes de Epi y Blas o los protagonistas de las series de animación Wallace y Gromit como una descarga adicional para sus dispositivos GPS.
Cómo de efectivas son estas técnicas es algo que está por ver. Se espera que el mercado de navegadores se mantenga plano, o incluso descienda ligeramente, en este 2011. Durante los próximos cinco años, según un informe de la consultora ABI Research podría caer casi un 50% en facturación por la guerra de precios y la competencia del teléfono. Sólo los navegadores conectados, capaces de extraer información de la Red, sobrevivirán y representarán aproximadamente un 40% del mercado en 2016. «Hay todavía un interesante mercado secundario por desarrollar con este tipo de dispositivos, desde análisis de datos y tráfico hasta publicidad, y creemos que a la larga este tipo de aplicaciones supondrá unos ingresos cada vez mayores para los fabricantes», asegura Dominique Bonte, autor del informe.
Los fabricantes, sin embargo, no se rinden. «El ejemplo de las cámaras en los teléfonos es la mejor forma de ilustrar nuestra visión. Tener una cámara en el teléfono no ha terminado con el mercado de las cámaras digitales», aseguró Richard Piekaar, de TomTom, durante la pasada feria alemana IFA. Los fabricantes de navegadores advierten también de las limitaciones del teléfono. Muchas veces, dependen de la conexión a la red móvil para poder mostrar los mapas o datos de tráfico y, cuando se circula a gran velocidad o lejos de los grandes núcleos de población, la conexión no siempre está disponible. Los teléfonos además, dejan de mostrar los mapas cuando entra una llamada y, según el móvil, un mensaje SMS también puede resultar en una pantalla bloqueada.
El TomTom Go LIVE 1005 de esta página, por ejemplo, incluye una conexión 3G, un navegador para buscar locales y puntos de interés a través de Google e información de hoteles y restaurantes de Expedia y TripAdvisor. Se puede programar un viaje entero, desde la ruta hasta los restaurantes donde parar para comer, los puntos de interés que visitar o el hotel donde hospedarse, sin tocar el teclado del PC. Al llegar al destino es fácil de desmontar -se ancla al salpicadero mediante un soporte magnético- y sirve como pequeña guía de viajes de bolsillo con información turística y de ocio local.
Su pantalla de cinco pulgadas -mayor que la que ofrecen los teléfonos- es multitáctil y capacitiva y, además de dar instrucciones en voz alta convencionales («gire a la derecha», «manténgase en el carril izquierdo»...), es capaz de pronunciar en voz alta los nombres de las calles, lo que ayuda a orientarse más fácilmente y rebaja el stress de la conducción. TomTom lo ha equipado con mapas de todo el mundo y acceso a la base de datos de conducción inteligente, con advertencias creadas por otros conductores e información meteorológica entre otros datos.
Otros fabricantes, como Garmin, están probando estrategias parecidas, y añaden funciones de personalización especiales que por ahora no están disponibles en móviles. La última idea ha sido incluir las voces de los personajes de Epi y Blas o los protagonistas de las series de animación Wallace y Gromit como una descarga adicional para sus dispositivos GPS.
Cómo de efectivas son estas técnicas es algo que está por ver. Se espera que el mercado de navegadores se mantenga plano, o incluso descienda ligeramente, en este 2011. Durante los próximos cinco años, según un informe de la consultora ABI Research podría caer casi un 50% en facturación por la guerra de precios y la competencia del teléfono. Sólo los navegadores conectados, capaces de extraer información de la Red, sobrevivirán y representarán aproximadamente un 40% del mercado en 2016. «Hay todavía un interesante mercado secundario por desarrollar con este tipo de dispositivos, desde análisis de datos y tráfico hasta publicidad, y creemos que a la larga este tipo de aplicaciones supondrá unos ingresos cada vez mayores para los fabricantes», asegura Dominique Bonte, autor del informe.
Los fabricantes, sin embargo, no se rinden. «El ejemplo de las cámaras en los teléfonos es la mejor forma de ilustrar nuestra visión. Tener una cámara en el teléfono no ha terminado con el mercado de las cámaras digitales», aseguró Richard Piekaar, de TomTom, durante la pasada feria alemana IFA. Los fabricantes de navegadores advierten también de las limitaciones del teléfono. Muchas veces, dependen de la conexión a la red móvil para poder mostrar los mapas o datos de tráfico y, cuando se circula a gran velocidad o lejos de los grandes núcleos de población, la conexión no siempre está disponible. Los teléfonos además, dejan de mostrar los mapas cuando entra una llamada y, según el móvil, un mensaje SMS también puede resultar en una pantalla bloqueada.
Comentarios
Publicar un comentario